cartas 160

Ayer asistí al final de la Ceremonia Cósmica que ofició el Honorable Don Juan Carlos Ortiz en la Casa Sede Mundial de la RedGFU en la Ciudad de México y escuché algunos eruditos diálogos sobre el Cerebro, el Alma, la Conciencia; las revoluciones científicas y las espirituales; la Física Cuántica, la Circulación de la Luz; los Maestros y los Discípulos Orientales y Occidentales. Me sentí impresionado por la capacidad de los interlocutores y sus argumentos matizados con frases como: …algún alumno de mis clases en la Universidad… las Escuelas Esotéricas comparadas… el MSMA en la página tal de la primera edición del YYY… las Cámaras Secretas de hace veintiséis mil años son las mismas de hoy… Etc., Etc. Al final me preguntaron qué opinaba yo. Me les escabullí por peteneras – como dicen los españoles y afirmé muy orondo: – El Todo está en todo y cada cosa está en su tiempo y en su espacio, que ya sabemos que nunca es el mismo espacio ni el mismo tiempo, y que la eternidad siempre está aquí y ahora, en el espacio y en el tiempo.

Entre en el Despacho de los Maestros y me puse a mirar la luminosa mañana sobre el área Sur de la Ciudad de México a través de las hojas y las ramas de las grandes Jacarandas que crecen frente al ventanal del despacho. Vi a dos pajarillos que se solazaban entre las ramas, uno saltando y volando, sin ir muy lejos, y al otro empeñado en estar junto a él. Entonces me di cuenta que uno era ella y otro era él. La historia de siempre – pensé – y me puse a mirar el caudaloso río de automóviles, camiones, motocicletas y carros de policía que fluían abajo sobre la Avenida Eugenia, que es un Eje Vial, con gran estruendo, atenuado por los cristales dobles de la ventana. Comprendí que en cada vehículo había gente que se dirigía a su trabajo para compartir sus esfuerzos con otros seres humanos y dar respuesta a sus necesidades y las de sus familiares. De paso, se me ocurrió recordar que hay personas que piensan que el asunto de la Gran Fraternidad Universal como medio para compartir experiencias y crecer juntos es invento mío.

Activé mi PC para revisar los correos que llegaron durante la noche y me encontré con una buena cantidad de asuntos y algunas importantes enseñanzas e informaciones que me llevarán varios días para leerlas y entenderlas. Seguí adelante y encontré algo de Don Daniel Furman, de Buenos Aires, preguntando si alguien tenía experiencia con alumnos con problemas cardiovasculares, pues un médico había mandado a uno de sus pacientes a practicar Yoga. Le contesté que primero pidiera al médico que le diera una responsiva médica y que comenzaran por enseñarle Jnana y Bakthi Yoga al alumno. Me quedé pensando si el médico sabría de Yoga algo más de lo que dicen las revistas con fotografías hermosas de Hatha Yoga y de Meditación.

Seguí con los correos y me detuve conmovido al leer uno de la esposa del Honorable Gurú Don Gerardo Motoa donde me cuenta que sus hijos están tratando de solidarizarse con su Padre y duermen en el suelo como lo hace él, ahora en su prueba de Instructor. Luego agrega que está feliz, a pesar de que algunas personas se acercan a ella y le preguntan con tristeza cómo se siente. – Me siento bien – les digo – y me siento enaltecida por el esfuerzo que hace mi esposo.

Interrumpí la lectura de correos porque llegaron a la Casa Sede el Muy Honorable Don Gustavo Toro y su Esposa la Gelong Doña Rocío Martínez procedentes de Colima, su más reciente escala en una larga gira, casi Ciudad por Ciudad, desde Colombia y los Estados Unidos de Norteamérica. Les pregunté cuánto tiempo iban a descansar en la Ciudad de México y me contestaron que solamente esta tarde y su noche, pues mañana, al amanecer saldrían para Dallas y Houston Texas, para continuar a Florida y la Costa Oriental de los EE.UU. de Norteamérica. Me pregunté qué movía a esta hermosa pareja a trabajar con tanto empeño y no tardé en preguntarme a mí mismo qué me movía a mí en otros tiempos para dictar hasta cinco conferencias en un día en algunas Ciudades de Centro y Sur América. Preferí seguir la conversación con Don Gustavo:

¿Qué tal le va con los Cruceros Virtuales con conferencias por Internet?
Muy bien, Maestro. La gente está interesada en participar.

Me lo imagino. Recuerdo que cuando lo conocí a usted en la Ciudad de Cali me invitó a participar en su programa de radio donde entrevistaba a toda clase de gente destacada en la Política, la Cultura, el Arte, la Religión y otras ramas del quehacer humano. Yo aproveché para dar a conocer el proyecto de hacer un Primer Encuentro Mundial para la Fraternidad Humana en Colombia y usted me presentó personalmente con las Autoridades de la Ciudad, incluyendo a la Curia del Valle del Cauca, para que les explicara mi proyecto. Y se hizo en Cali y tuvo mucho éxito. Creo que hasta más de uno de los más recientes que dirigió usted y Doña Rocío en New York, sin minimizar a ninguno.

Bueno, esos encuentros siguen proliferando, ahora con el nombre de COPLANETS.
Sí, el nombre se los puso don Francisco Morales de Granada, España, y hasta les hicieron una estatua en una plaza de Jaca con el nombre de Monumento a la Fraternidad Universal.

Ya que cita usted a Don Francisco Morales hay que recordar a Don Antonio Requena y a su esposa Doña María, pues entre todos coordinaron el Encuentro para la Fraternidad Humana en el Palacio de Convenciones de Granada, que abrió las puertas del Palacio Real para una audiencia y una felicitación de Su Majestad el Rey Don Juan Carlos Primero.

Esta mañana volví a las andadas con los correos electrónicos antes de la Ceremonia. Encontré algunos muy significativos y los cité durante el diálogo que siguió al Ceremonial. El que causó más impacto fue un Cortometraje de un aficionado que fue premiado internacionalmente y que se ajusta como anillo al dedo para nosotros. La historia, es más o menos así:

Un pordiosero ciego yace a la orilla de un prado en un jardín donde juegan los niños. con un letrero mal escrito que pide compasión para el ciego. Una que otra persona le lanza a veces una moneda, despectivamente. El pordiosero tiene el oído aguzado y oye los pasos de un señor elegante que carga portafolios de ejecutivo y se detiene frente a él. El pordiosero palpa uno de sus zapatos y espera. El ejecutivo toma el cartel, pergeñado sobre el papel de una caja de cartón doblada; busca un lado limpio y escribe algo. Lo coloca en su lugar y se aleja. El ciego se queda desconsolado. Pero las monedas comienzan a caer más a menudo y el pordiosero se siente feliz. Tiempo más tarde oye los mismos pasos y los pasos se detienen frente a él otra vez. El ciego vuelve a palpar el mismo zapato y pregunta a quien lo calza qué fue lo que escribió en el cartel. El hombre le dice: Simplemente esto: HOY ES UN DÍA HERMOSO, ME DA PENA NO PODERLO CONTEMPLAR.

El tema estimuló los comentarios. Alguien recordó que, en la Alhambra de Granada España hay una placa con un poema que dice: Dale una limosna / mujer / que no hay mayor desgracia que ser / ciego en Granada. Otro dijo que deberíamos poner una placa en cada Casa Sede y Ashram de la RedGFU que diga: Dale una enseñanza / Maestro / que no hay mayor desgracia que ser / parcial y fanático / en la Gran Fraternidad Universal.

Todos estuvieron de acuerdo en que hay que tener ojos para ver y oídos para oír y poder apreciar el bellísimo proyecto en marcha de la RedGFU en lugar de andar haciendo intrigas proselitistas y críticas insidiosas.

Sat Arhat José Marcelli Noli
www.redgfu.net/jmn

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