1. Somos seres Humanos. Todo, en la Realidad, gira en torno a un centro. El centro del Ser Humano es el Ser y la periferia lo Humano. Todo proviene del centro y se manifiesta en la periferia como forma en Espacio y existencia en Tiempo. Lo que impide la dispersión del Conjunto de Conjuntos de partículas de la Naturaleza humana es el Ser. Este fenómeno es llamado en Iniciación Circulación de la Luz, de la unidad hacia la diversidad y de la diversidad hacia la unidad. La Teúrgia y la estructura institucional de la Iniciación debe funcionar del mismo modo.
2. A esto se debe la declaración que hace el Magister en el Ceremonial Cósmico cuando traza una Cruz sobre su frente con el dedo pulgar y pronuncia: EGO SUM, Yo Soy. El Yo es lo Humano el Ser es lo Sagrado.
3. La unidad del Ser en el Único SER es la Verdad. La Diversidad es la Naturaleza que manifiesta al Ser en Conjuntos y Conjuntos de Conjuntos. Un conjunto de conjuntos de Centros de partículas eleva el Centro de todos sus Centros y lo convierte en un Centro Superior que manifiesta una Conciencia Superior. En Iniciación se llama a este fenómeno Iniciación Viviente.
4. Un Iniciado en lo Sagrado y Real no lo es por su manejo del lenguaje y su erudición, sino por lo que manifiesta en su propia vida como instinto, moral, inteligencia, amor y sentido de lo eterno, todo en presente.
5. Los Grados que se reconocen en Iniciación Sagrada y Real son Grados Vivientes, no teóricos, o a futuro. Grados reflejados en actitudes, vivencias y Hechos Bien Hechos. Cualquiera puede adjudicarse un Grado o buscar quien se lo adjudique por razones proselitistas, pero solamente se puede justificar un Grado en forma viviente con el aval de un Maestro que se haga responsable de los actos del grado que reconoció. Quien se ha Iniciado en la experiencia de lo Sagrado debe de revelarse por Sí mismo, con lealtad a los principios de la Tradición que sigue y sin protagonismos.
6. Las Claves que se dan para cada Grado definen un rumbo a seguir, primero en la Realidad y finalmente en la Verdad donde se dan encuentro el Demiurgo y el Teúrgo que se alternan en cada Octava de Manifestación, del Demiurgo al Teúrgo y del Teúrgo al Demiurgo.
7. En lo Humano la Iniciación se hace viable por polaridad como Realidad, en lo Sagrado por la Circulación de la Luz. La polaridad masculino-femenina no se excluye de la Realidad. Para encender una fuente de Luz se necesitan dos polos. A esto se debe la aparente dicotomía de la Madre y el Hijo, del Cristo Celeste y el Cristo Terrestre, de la Verdad y la Realidad del MSMA y el MVHM.
Sat Arhat José Marcelli Noli
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viernes, mayo 02, 2008
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